miércoles, 10 de febrero de 2016

"Frutos de la misma rama"

Historia compartida. Sonrisa y lágrima.

Simplemente frutos, de la misma rama.

¡Cómo describirte!

Sangre de mi sangre y aliento en el camino, pues eres infinito regalo del corazón del cielo.

El tiempo vuela raudo, entre las olas de la vida y arranca nuestros barcos, cada vez más y más lejos de la orilla, de esa costa nuestra, tantos años compartida.

Tal vez tú busques una isla y yo, miles de bahías.

Hermana mía, donde tú estés y a dónde vayas, mi corazón será tu ángel, el mismo que abrazabas; y tus palabras serán mi aliento, mi fuerza, mis alas.

Y toda tú por siempre,
mi más grande camarada.

Te quiero hermana!

  Xisca Carbó en
Es racó de na Xisca